El húmero es el hueso del brazo, que va desde el hombro hasta el codo; las fracturas de su diáfisis son relativamente frecuentes. 

El tratamiento médico (no quirúrgico) del húmero se indica para fracturas sin o con mínimo desplazamiento y consiste en una inmovilización inicial del hombro y codo, con férulas de yeso, que se cambian a las 2 o 3 semanas por un brace hecho a la medida en material termo formado. El brace permite movilidad parcial del hombro y codo, y debe utilizarse al menos por 3 meses.

El manejo quirúrgico se indica para fracturas desplazadas. El uso de técnicas mínimamente invasivas en la fijación del húmero ha demostrado resultados consistentes y muy satisfactorios. Es mi técnica preferida, generalmente, uso una placa deslizada, haciendo solo dos incisiones en el brazo, cada una de aproximadamente 3 cm. La cirugía de la fractura del húmero puede ser ambulatoria o con un día de hospitalización. Recomiendo utilizar el cabestrillo por una o dos semanas solo para ayudar en el manejo del dolor, ya que no requiere inmovilización formal y el hombro y el codo quedan libres.

Estas fracturas comprometen la región superior del brazo, tienen 2 formas de presentarse: fractura por fragilidad ósea en el adulto mayor (más frecuente), y trauma de alta energía en pacientes más jóvenes. 

La gran mayoría de fracturas en el adulto mayor se pueden manejar de manera satisfactoria sin cirugía, siguiendo un protocolo médico que usualmente tiene resultados favorables. 

Cuando se requiere cirugía, según la edad y características de las fracturas, se pueden acomodar los fragmentos en su sitio y sostenerlos mediante placas, tornillos o clavos; a este procedimiento le denominamos osteosíntesis. La osteosíntesis está indicada principalmente en pacientes jóvenes con fracturas desplazadas.  En algunas ocasiones pueden utilizarse técnicas mínimamente invasivas o asistidas por artroscopia. 

En otras ocasiones es necesario colocar una prótesis que reemplaza partes del hombro, lo que llamamos artroplastia. La artroplastia está indicada en pacientes mayores con indicación quirúrgica, y la tendencia actual es realizar una prótesis reversa. 

Tanto la osteosíntesis como la artroplastia en manos expertas pueden llevar a un resultado satisfactorio.  La cirugía para fracturas del húmero proximal requiere generalmente un día de hospitalización y el tiempo de recuperación es variable, de acuerdo al patrón de fractura y a la cirugía realizada.

La fractura de la clavícula es una lesión frecuente que usualmente ocurre por una caída sobre el hombro. Las radiografías de la clavícula permiten confirmar el diagnóstico y en conjunto con la valoración clínica, permite definir el mejor abordaje terapéutico. 

Las fracturas con mínimo o sin desplazamiento pueden tratarse usando un cabestrillo por 3 a 4 semanas y, según la evolución, acompañado de terapia. Algunas fracturas desplazadas pueden beneficiarse de tratamiento quirúrgico, que consiste en acomodar los fragmentos en su sitio y sostenerlos allí con ayuda de elementos de osteosíntesis. En esta cirugía, usualmente utilizo una placa y tornillos. Según las características de la fractura, la cirugía puede realizarse abierta o con técnicas mínimamente invasivas.

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En el codo confluyen 3 huesos: el húmero, el cúbito y el radio, que pueden estar comprometidos, aislados o en diferentes configuraciones en caso de fractura. 

El codo es una articulación muy sensible a la inmovilización, con gran tendencia a la rigidez. Por este motivo, la mayoría de fracturas que se dan en esta zona se benefician de un tratamiento quirúrgico. La cirugía permite restaurar la superficie articular, la alineación de los huesos y una movilización temprana y segura de la articulación, disminuyendo considerablemente el riesgo de rigidez y mejorando de manera significativa el resultado funcional. 

El tratamiento quirúrgico en el codo requiere gran cuidado de los tejidos blandos, por lo que con frecuencia es necesario esperar algunos días a que se desinflame un poco antes de poderlo operar. Usualmente, esta cirugía es abierta y requiere el uso de placas, tornillos, clavos y suturas. 

Si presentas una fractura en tu codo debes tener una valoración prioritaria para establecer la mejor conducta a seguir. La cirugía generalmente puede ser ambulatoria o con un día de hospitalización. Recomiendo el uso de un cabestrillo por una o dos semanas.